¿Buscas una distribución Linux diferente a las de siempre, pero no demasiado? Peppermint 10 llega para cubrir huecos raros, pero como hace tanto tiempo que no tenía su propio espacio en estas páginas y como se acerca a cumplir su décimo aniversario, además, con una versión de numeración tan redonda como la que nos ocupa…
En el caso de que no la conozcas, Peppermint es una de tantas derivadas de Ubuntu, cuyo sello de distinción es un escritorio supuestamente ligero, mezcla de LXDE y Xfce, incluyendo aplicaciones de Linux Mint; así como integración con aplicaciones web gracias a uno de sus desarrollos propios: Ice-SSB (Site Specific Browsers), con el cual puedes crear de manera fácil y rápida webapps con Chrome y Chromium, pero también con Firefox y Vivaldi.
Volviendo con Peppermint 10, su principal novedad es la actualización del sistema a la base de Ubuntu 18.04 LTS, con la imagen de instalación actualizada hasta el 14 de mayo (una vez instalada las actualizaciones seguirán llegando, por supuesto). Eso significa en estos momentos, por ejemplo, que trae el kernel Linux 4.18, pero según advierten sus desarrolladores, lleva activado el Hardware Enablement Stack, por lo que eventualmente se actualizará a Linux 5.0 y sucesivas versiones, tanto del kernel como de los controladores gráficos.
La otra gran novedad de Peppermint 10, sobra decirlo, es la actualización de Ice-SSB, que ahora tiene soporte para perfiles aislados en Chromium, Chrome y Vivaldi; mientras que «en Firefox están siempre aislados», recuerdan los desarrolladores del proyecto, lo cual tiene una parte buena y otra mala (ver el artículo enlazado arriba para más datos). No obstante, otra mejora de Ice-SSB son varios marcadores por defecto en las webapps de Firefox para simplificar la instalación de complementos, muy de agradecer.
Si te apetece probar Peppermint 10, en la página de descargas encontrarás ediciones para 32 y 64 bits, además de las instrucciones para instalarlo, si es que las necesitas. No es la distro Linux más ligera o amigable del mercado, pero tiene su puntito de personalidad, de eso no cabe duda.